En una destacada resolución, hoy al mediodía los familiares de Rubén Núñez Ginez, exdirigente magisterial, recibirán acceso a la cuenta bancaria del difunto líder en el palacio de gobierno.
Este hecho marca el fin de más de 4 años en los que sus recursos financieros estuvieron congelados, debido a acusaciones infundadas de lavado de dinero y otros delitos por parte del gobierno anterior, encabezado por Peña Nieto.
Es importante subrayar que esta era una de las demandas principales de la dirigencia de la sección 22 del SNTE, liderada por Jenny Pérez Martínez, quienes buscaban hacer justicia en memoria del fallecido dirigente magisterial.
La intervención del gobernador del estado, Salomón Jara Cruz, así como las gestiones realizadas por el director general del IEEPO, Emilio Montero Pérez, fueron clave para lograr este avance.
Ayer, ambos funcionarios mantuvieron una reunión final con Pablo Gómez, titular de la Unidad de Inteligencia Financiera, quien aseguró que ya no existía ninguna acusación pendiente contra los exdirigentes magisteriales y que las acusaciones previas resultaron ser falsas.
Después de más de 8 años de intensas investigaciones, el gobierno federal finalmente determinó que no había delito alguno que perseguir en contra de los exdirigentes sindicales del magisterio.
Como resultado, se ordenó el descongelamiento de sus cuentas bancarias, con la aprobación de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF).
En consecuencia, hoy el gobernador estatal entregará a los familiares de Rubén Núñez Ginez el acceso a los recursos financieros que les corresponden.
Este importante logro no solo restituye los derechos financieros de los exdirigentes magisteriales, sino que también evidencia la necesidad de una revisión exhaustiva de las acusaciones antes de tomar medidas drásticas y afectar la vida de las personas involucradas.
La rectificación por parte del gobierno federal representa un paso hacia la justicia y la reparación de los daños causados a estas figuras clave en el sindicato magisterial.
