En Oaxaca, cada vez son más los habitantes de las zonas rurales e indígenas que cultivan productos de alto valor nutritivo para los sectores de mayor ingreso de la sociedad y que de manera gradual pasan del subsidio al financiamiento para ofertar sus productos en los mercados.
Así lo dijo Margarito Pérez Luviano, delegado estatal del Instituto Nacional de la Economía Social (INAES), quien destacó que el sector social de la economía es visible y que se ve la aportación que hacen los pequeños productores.
“Nuestro objetivo es impulsar a los grupos para que vayan desarrollando y aprovechando segmentos de mercado que son importantes, para ellos y su familia”, señaló.
Tras admitir que en tiempos de crisis mundial se debe privilegiar el consumo interno, apuntó que también se debe ir más allá de la generación de ingresos y también se debe ahorrar.
“Por ello es que tratamos de enlazar a los productores con la parte que ofrece los financiamientos. Hablamos de la banca oficial. De la banca de desarrollo que es Fira, Nacional Financiera y Bansefi”, apuntó.
El funcionario federal señaló que los productores no pueden quedarse sólo con el subsidio y deben buscar financiamiento, por lo que se respaldan proyectos que estén amarrados con el mercado y que generen utilidades, pues de esta manera se puede pagar un financiamiento.
“No hay créditos malos. Hay proyectos malos. Por eso buscamos proyectos que realmente tengan flujo de efectivo suficiente para pagar el financiamiento y para generar los ingresos que se requieren”, añadió.
También reconoció que la mayoría de los productores, cuando son beneficiarios de créditos, pagan a tiempo, por lo que la morosidad es un tema que es muy limitado en Oaxaca.
Señaló que se respaldan varios proyectos y que entre los más importantes que apoya el INAES se encuentran los de los productores de café y miel, así como de los 4 tipos de barros, además de la pequeña micro industria del cacahuate y el ajonjolí, entre otros productos.
Apuntó que la elaboración de panela granulada le da un sentido más orgánico a la producción y que si se une a la producción de café orgánico, como complemento del azúcar, tiene un mayor valor de mercado.
Puntualizó que esta es una de las razones por la que se insiste en impulsar la producción orgánica, ya que de esta manera se entra a un nicho de mercado especial.
“Ahora se cultivan productos de alto valor que la gente puede pagar y es por ello que en Oaxaca se tienen los mejores productos”, concluyó.