Una buena alimentación es fundamental desde la infancia hasta la vejez. Los aspectos básicos de una dieta son los mismos a lo largo de nuestra vida, pero las necesidades nutricionales cambian a medida que vamos envejeciendo.
Al respecto, la especialista en Nutrición y Dietética del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Oaxaca, Diana Flor García Lozano, dijo que en el proceso de envejecimiento se presentan cambios corporales, lo que hace necesario reorientar el estilo de vida para evitar alteraciones metabólicas y alimentarias.
Durante esta etapa de la vida, el apetito tiende a declinar, al igual que la cantidad de alimentos que se consumen, además de la preferencia por comidas con bajo valor nutrimental o energético (caldos, atole de agua, verduras muy cocidas), por lo que se debe tener especial cuidado para tener una alimentación equilibrada que proporcione las sustancias nutritivas que se recomiendan para gozar de buena salud.
Entre las recomendaciones generales a seguir destacan evitar alimentos con pocos nutrientes como azúcar de mesa y harinas refinadas, exceso de hidratos de carbono simples, pues pueden producir hiperglucemia, incluir multivitaminas, calcio, vitaminas D, B y ácido fólico.
La especialista del IMSS mencionó que se debe consumir fibra diariamente para mejorar el movimiento del tubo digestivo, así como tomar abundantes líquidos y realizar 30 minutos de ejercicio.
Señaló que en el Centro de Seguridad Social (CSS) del IMSS se ofrecen cursos ocupacionales para adultos mayores con la finalidad de fomentar la salud de manera integral.
Recordó que se debe tener en cuenta que enfermedades crónico degenerativas (obesidad, padecimientos del corazón; hipertensión arterial, gota, diabetes y osteoporosis) están relacionadas con una alimentación desequilibrada y la falta de actividad física.
Diana Flor García Lozano, indicó que existen alternativas para cada caso como las dietas de reducción, bajas en colesterol y azúcares, las ricas en fibra y agua, las bajas en sal, así como las bajas en purinas y vísceras.
Finalmente, refirió que es recomendable consultar primero con su médico, cuáles son sus requerimientos alimenticios tomando en cuenta su edad, estado de salud y la actividad que realiza diariamente.
—o0o—