Santa Cruz Xoxocotlán, Oax., 03 de dic.- Durante más de treinta años, las familias del Fraccionamiento Riveras del Atoyac aprendieron a convivir con las consecuencias de un drenaje colapsado y una red sanitaria deteriorada. Sin embargo, pese a la desatención de autoridades municipales pasadas, siguieron tocando puertas y hoy el escenario se vislumbra diferente.
El pasado martes, los rostros de molestia se volvieron sonrisas. Para muchos, es un día que parecía no llegar.
Con el respaldo del Ayuntamiento y de la presidenta municipal, Nancy Benítez, la comunidad se reunió para ser testigo del inicio de esta obra que, más que infraestructura, representa dignidad para más de 2 mil habitantes.
Estela Ramírez Meixueiro, presidenta del fraccionamiento —el primero que se asentó en Santa Cruz Xoxocotlán—recordó los años de tocar puertas, de redactar solicitudes, de organizar reuniones y de ver cómo, una y otra vez, su petición era ignorada.
“Esta obra nos cambia la vida”, dijo mientras algunas de sus vecinas asentían con fuerza. “Es dignificar nuestra forma de vivir, porque por mucho tiempo normalizamos los malos olores, las fugas, las enfermedades… y eso no es justo para nuestras familias”.
Mientras la maquinaria operaba y el pavimento comenzaba a ceder, doña Estela celebraba. “Es apenas el inicio, pero estamos contentos. Para nosotros, esta obra ante todo es un acto de humanidad”, puntualizó.