La infraestructura de transporte en Oaxaca enfrenta un proceso de transformación y recuperación de confianza en respuesta a años de abandono y prácticas irregulares.
En la conferencia del gobernador de Oaxaca, Salomón Jara Cruz, con la secretaria de Movilidad, Claudina Degyves Mendoza, destacaron los pasos que el gobierno estatal está tomando para modernizar el transporte público y regular su funcionamiento, con un enfoque en eficiencia, accesibilidad y transparencia para la ciudadanía.
Históricamente, el sistema de transporte público en Oaxaca sufrió un proceso de deterioro que dejó a muchas zonas sin rutas urbanas ni suburbanas adecuadas. Degyves Mendoza explicó que, debido a la falta de planificación, se permitió que los taxis asumieran funciones de transporte colectivo en zonas donde deberían operar autobuses, lo cual incrementó los costos para los usuarios y generó una oferta de transporte deficiente. La proliferación de permisos y concesiones irregulares, otorgados sin estudios de viabilidad, exacerbó el problema, llevando al colapso de un sistema originalmente pensado para conectar comunidades y ofrecer una alternativa económica a los ciudadanos.
El gobierno estatal ha centrado su estrategia de modernización en el sistema de transporte Citybus, que proyecta expandirse hacia zonas como Etla y otras áreas periféricas de la capital. La reciente inclusión de unidades de este sistema en la Feria del Quesillo en Etla mostró la aceptación que podría tener una red más extensa. La secretaria Degyves enfatizó que, además de mejorar la calidad del transporte, se está trabajando en la implementación de señalética, infraestructura de paradas y normas técnicas que aseguren espacios seguros e iluminados para los pasajeros.
Para 2025, se espera que el sistema incorpore unidades híbridas que permitirán cubrir rutas con mayor eficiencia, contemplando vehículos de diferentes tamaños para zonas céntricas y rutas de menor demanda. Este enfoque responde a la solicitud de diversas comunidades, que demandan accesibilidad y un servicio de calidad a precios accesibles, como el actual costo de $8 en el Citybus, una tarifa que el gobernador confirmó que se mantendrá con el objetivo de no impactar la economía familiar.
La regulación de las tarifas es otro punto clave en la estrategia de transparencia del gobierno. Desde el anuncio de un ajuste tarifario, la Secretaría de Movilidad ha lanzado operativos para evitar cobros indebidos. Degyves señaló que los operadores están obligados a portar tarjetones visibles para los usuarios, los cuales certifican el precio autorizado del servicio. De acuerdo con la funcionaria, los conductores que incumplan con estas normativas estarán sujetos a sanciones, destacando la importancia de las denuncias ciudadanas para detectar irregularidades y mejorar la fiscalización del servicio.
El gobernador Jara subrayó que la meta de su administración es rescatar y fortalecer el transporte público oaxaqueño para que cumpla con su propósito social y facilite la movilidad en toda la región. Esta visión incluye la participación de los gobiernos municipales para coordinar mejoras en el mobiliario urbano, asegurando que el desarrollo del transporte vaya acompañado de una infraestructura adecuada en términos de paradas y señalización.
La intervención del gobernador y la titular de la Secretaría de Movilidad evidencian una gestión comprometida con el avance de un transporte público accesible, transparente y funcional. Los oaxaqueños aguardan con expectativa los resultados de este ambicioso plan de modernización, que promete no solo conectar comunidades, sino también reducir costos y mejorar la calidad de vida en la región.
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