- El diálogo entre expertos del Centro INAH Oaxaca, la zona arqueológica y la Fundación Alfredo Harp Helú, concretó este ambicioso proyecto expositivo
- Lo novedoso del mismo fue la integración de un Consejo Infantil de Diseño, que aportó ideas sobre temas, juegos, instalaciones y talleres
Con apoyo del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), a través del Centro INAH Oaxaca y la Zona Arqueológica de Monte Albán, el Museo Infantil de Oaxaca (MIO) invita a la exposición El reino de las nubes, concebida para compartir con la niñez estatal los valores esenciales de la civilización zapoteca y el esplendor de su antigua capital.
En una experiencia interactiva, guiados por la curiosidad, colores y formas, niños y niñas, e inclusive adolescentes, experimentarán un acercamiento lúdico a diversos aspectos que constituían el universo de la citada urbe prehispánica: los oficios de sus habitantes, su arquitectura y urbanismo, comida, medicina tradicional, religión y espiritualidad, expresados en rituales como el juego de pelota.
El director general del MIO, Luis Arturo Saavedra Rubio, dijo que “aunque Oaxaca posee una riqueza cultural notable, mucho del material diseñado para acercarla a los públicos infantiles parece un añadido a la divulgación para los adultos. Aún más distante suele ser la interpretación de los sitios arqueológicos; de hecho, para los más jóvenes que visitan estos lugares resulta casi imposible imaginar cómo era la vida en esas ciudades antiguas”.
De ahí que, gran parte de los juegos, experiencias y contenidos de la exposición nacieron de varias dudas razonables: ¿En qué términos Monte Albán les resultaría interesante a las infancias?, ¿cómo incluirlas en su interpretación?, ¿de qué manera conectar sus experiencias cotidianas con las de personas que vivieron y murieron hace cientos o miles de años?
Lo primero que hizo el MIO fue preguntar directamente. Los colaboradores del museo, diseñadores, museógrafos y educadores, invitaron a un grupo de 12 niñas y niños a integrar el Consejo Infantil de Diseño, el cual se reunió cada dos semanas, durante seis meses, para participar en esta propuesta expositiva.
“El grupo no solo tuvo la libertad de opinar sobre todos los aspectos de El reino de las nubes, antes de que se materializaran, sino que contribuyó con ideas valiosas sobre temas, juegos, instalaciones y talleres. Sus participantes, incluso, tuvieron poder de veto sobre las decisiones”, detalla Arturo Saavedra.
A su vez, gracias al acompañamiento constante de los especialistas del Centro INAH Oaxaca, la zona arqueológica y la Fundación Alfredo Harp Helú Oaxaca, se concretó un proyecto curatorial ambicioso, consciente de los alcances de una exposición didáctica, pero apegado a los descubrimientos más recientes de la arqueología.
Lo anterior cobra sentido en un contexto como el oaxaqueño, donde los pueblos originarios mantienen vitalidad y agencia, de manera que el MIO fue especialmente cuidadoso de ilustrar todas aquellas formas en las que la cultura de Monte Albán ha dejado ecos en las comunidades del presente.
En las bodegas de la antigua estación del Ferrocarril Mexicano del Sur, sede del museo, se construyó una ensoñación miniatura de Monte Albán, distribuida en seis salas interactivas, para que públicos de todas las edades puedan sentir que han viajado más de 1,000 años atrás, por medio del juego y la exploración autónoma.
El reino de las nubes es un viaje al apogeo de la ciudad del jaguar. Por ejemplo, se puede armar un rompecabezas del “plato del buen comer zapoteco”, para acercarse a la dieta prehispánica; o jugar una versión de tenis de mesa que permite comprender las dinámica físicas, rituales, políticas y sociales del juego de pelota prehispánico.
En todos los casos, se trata de experiencias vivas y memorables. De ahí que, durante los próximos dos años, los visitantes podrán seguir el camino de los astros en el Observatorio, pedir un consejo a sus ancestros en la mencionada tumba zapoteca y ofrecer tributos a Pitao Cocijo, deidad zapoteca de la lluvia.
Además, como es la tradición del MIO, cada mes se explorarán nuevos aspectos de la civilización zapoteca, a través de talleres, excursiones y eventos especiales, que serán publicados en las redes sociales. Uno de ellos será la presentación del libro infantil ilustrado Un día en Monte Albán, una guía de interpretación de la zona arqueológica.
El primer tiraje, de distribución gratuita, consta de 5,000 ejemplares y estará disponible a partir de diciembre de 2025, en las instalaciones del MIO (calzada Francisco I. Madero 511, barrio del Ex-Marquesado, ciudad de Oaxaca). El acceso a la exposición es gratuito, de martes a domingo, de 11:00 a 18:00 horas.
