Año con año, los artesanos oaxaqueños esperan que la Guelaguetza y otras temporadas vacacionales les permitan tener un mejor ingreso para su supervivencia.
Sin embargo, ante la falta de apoyos oficiales, la mayoría termina por decepcionarse.
Ello ha provocado que muchos artesanos desistan de seguir elaborando sus productos y, la mayoría, prefieren emigrar a Estados Unidos.
Las manos de los artesanos oaxaqueños son mágicas cuando se trata de darle forma a la madera, el barro, la lámina, la piedra y el hilo, sin embargo, aunque tienen el reconocimiento y la admiración del turismo, su economía es precaria.
Por ello, gradualmente muchos oaxaqueños de más de 400 mil familias que se dedican a la elaboración de algún tipo de artesanías, han abandonado su actividad para migrar a Estados Unidos o buscarse otro tipo de empleo.
Ante esta situación, el dirigente de la Asociación de Familias Artesanas de Oaxaca, Marco Antonio Miguel Santiago, pidió a las autoridades estatales rescatar la producción artesanal de la entidad e impulsar la comercialización de artesanías para sacar del atraso y la marginación a miles de familias que sobreviven en este sector.
“La producción de artesanías debe ser permanente. Sin embargo, en algunos casos, los artesanos han tenido que frenar la creación de piezas artesanales porque no encuentran mercado. Es necesario que el gobierno estatal les explique cómo competir y cómo vender, acercarlos a los lugares de comercialización”, apuntó.
Asimismo señaló que el gobierno estatal no se ha preocupado por temas que afectan a los mismos artesanos.
“Es muy cómodo buscarse a unos cuantos artesanos y exhibirlos en varias ferias y concursos. Lo que hace falta es un trabajo de campo en el que se identifique a los verdaderos artesanos. Principalmente a aquellos que tienen carencias. No se trata de realizar eventos mediáticos, sino de apoyar a los artesanos”, expresó.
Reconoció que un buen número de artesanos que viven en la zona metropolitana han aprovechado las tecnologías de la información y otros medios para comercializar su producción, sin embargo, apuntó que en la mayoría de los pueblos de Oaxaca se sigue esperando que llegue el turismo a comprar las artesanías.
También demandó al Congreso local actualizar la normatividad de los artesanos para que se reconozca a quienes se dedican a esta actividad y se les brinde todo el apoyo para enfrentar la crisis económica.