Un total de 6 áreas naturales protegidas de Oaxaca están en riesgo por la presión que ejercen la invasión de asentamientos irregulares; prácticas de agricultura y ganadería extensiva; explotación forestal; incendios forestales; saqueo de recursos naturales e irregularidades en la tenencia de la tierra.
Así lo estableció Helena Iturribarría Rojas, directora del Instituto Estatal de Ecología y Desarrollo Sustentable, quien destacó la importancia de conservar y preservar los parques estatales “Cerro del Fortín”; “Cerro Ta-Mee”; “Hierve El Agua”; el Parque Ecológico Regional del Istmo y las reservas ecológicas “La Sabana” y del Cerro del Fortín, Cruz Blanca y el Crestón.
“Es importante sumar esfuerzos, gobierno y sociedad civil, para contrarrestar los efectos negativos que amenazan nuestras áreas naturales protegidas. Es necesario conservar los servicios ambientales de Oaxaca”, apuntó.
De acuerdo con el gobierno estatal, el establecimiento y operación de las Áreas Protegidas de carácter estatal constituyen actualmente la estrategia más importante para la conservación del patrimonio biológico de Oaxaca y de los servicios ambientales que brinda a toda la población en general.
Asimismo informó que el aprovechamiento de los ecosistemas y biodiversidad que poseen debe efectuarse dentro de límites que impone la necesidad de conservarlas a largo plazo.
Por último indicó que en el estado, desde hace 12 años, se han decretado seis Áreas Naturales Protegidas por parte de Gobierno Estatal, cuatro de ellas clasificados como Parques Estatales y dos como Zonas de Reserva Ecológica, en conjunto cubren una superficie de 8 mil 667.51 hectáreas (el 0.09 por ciento de la superficie total del estado), mismos que se encuentran ubicados en diversas regiones del Estado de Oaxaca y albergan una importante variedad de especies de fauna y flora.