La reciente temporada de lluvias ha causado estragos en múltiples comunidades del estado de Oaxaca, con afectaciones significativas en caminos, carreteras y viviendas. El titular de la Coordinación Estatal de Protección Civil, Manuel Maza Sánchez, presentó un balance exhaustivo de la situación, señalando que la prioridad del gobierno, encabezado por el gobernador Salomón Jara Cruz, es restablecer la comunicación y la seguridad en las zonas afectadas.
Desde la víspera, durante una reunión del Consejo Estatal de Protección Civil, los municipios del distrito de Ixtlán, incluyendo La Natividad, San Juan Tabaá y Santa María Temascalapa, informaron de daños considerables. Las principales afectaciones reportadas son deslizamientos de tierra y desbordamientos de ríos que han bloqueado carreteras, incomunicando a varias comunidades. En algunos casos, como en La Natividad, se han registrado peligros inminentes debido a la inestabilidad de las laderas. “El riesgo es elevado, y los geólogos ya están trabajando en la evaluación detallada de la zona”, señaló Maza Sánchez.
Uno de los momentos más dramáticos de esta crisis ocurrió cuando un arroyo desbordado arrasó una panadería en La Natividad, un incidente que se viralizó en las redes sociales. El gobierno ha desplegado brigadas en todas las zonas afectadas, con maquinaria y personal especializado. En Villa Alta, por ejemplo, se ha trabajado para despejar un carril que permite el acceso parcial, aunque las lluvias continúan dificultando las labores de rehabilitación.
Los municipios de la región mixe, como San Pedro y San Pablo Ayutla y Tamazulápam del Espíritu Santo, también han sufrido graves daños. Las autoridades han desplegado maquinaria para despejar caminos que permiten la entrada de vehículos de apoyo y alimentos, principalmente a través de Diconsa. En la región del Istmo de Tehuantepec, varias comunidades están incomunicadas debido a la destrucción de caminos y puentes.
El titular de Protección Civil subrayó que las autoridades están trabajando en estrecha colaboración con las comunidades afectadas para restablecer las comunicaciones lo antes posible. Sin embargo, la magnitud de las afectaciones, combinada con las inclemencias del tiempo, plantea un reto considerable. Las lluvias continúan, y las labores de rehabilitación se desarrollan en medio de condiciones meteorológicas adversas.
En su declaración, Maza Sánchez recalcó que, aunque la situación es crítica, el gobierno está comprometido en atender las necesidades más urgentes de la población. “La instrucción del gobernador es clara: dar prioridad a quienes están incomunicados y restablecer los caminos que conectan a las agencias y comunidades”, enfatizó.
El panorama en Oaxaca, especialmente en las zonas montañosas y rurales, sigue siendo complicado, pero el trabajo coordinado entre las distintas dependencias gubernamentales y la población afectada es clave para avanzar en la recuperación.