Misael Sánchez
En un contexto marcado por la necesidad de mayor transparencia y eficiencia en la administración de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (UABJO), el rector Cristian Carreño delineó un plan de acción que promete transformar el funcionamiento de la institución.
En entrevista en la biblioteca Fray Francisco de Burgoa, abordó algunos de los desafíos más significativos que enfrenta la universidad, desde la implementación de relojes checadores para registrar la asistencia del personal, hasta la búsqueda de una mayor vinculación con el gobierno federal para asegurar recursos financieros.
Uno de los puntos clave que destacó el rector fue la implementación de un sistema de control de asistencia, a partir del primero de octubre, que no involucra datos biométricos, pero sí la utilización de números de empleados para registrar la entrada y salida del personal.
Esta medida, que se aplicará tanto a los docentes como a los trabajadores administrativos, busca combatir el ausentismo, un problema que, según el rector, ha afectado gravemente a la universidad.
«Nos estamos enfrentando a la resistencia de ciertas costumbres que han perjudicado a la institución, pero es necesario poner orden», señaló Carreño con firmeza.
El rector reconoció que en el pasado hasta el 30% del personal docente se ausentaba, afectando la calidad educativa de los estudiantes y las finanzas de la universidad.
Para combatir esto, desde hace varios meses se ha implementado un mecanismo por el cual los empleados que no asisten no reciben su salario de manera automática.
«Si no asisten, deben venir a la institución y explicar la razón. Solo así, con la constancia de su trabajo, pueden recibir su pago», detalló Carreño.
Esta estrategia, que al inicio afectó a 50 trabajadores, ha tenido resultados positivos, lo que refuerza el compromiso de la administración actual con la transparencia.
En paralelo a las reformas administrativas, el rector también destacó la importancia de la relación con el gobierno federal.
A pesar de ciertos retrasos, como el reciente incremento salarial del 4% para el personal de la UABJO, Carreño confía en que habrá un fortalecimiento de la colaboración con la Secretaría de Educación Pública (SEP).
La universidad, explicó, recibe el 88% de su presupuesto del gobierno federal, lo que hace indispensable mantener una buena relación con las autoridades para asegurar el flujo de recursos.
El rector también expresó la importancia de aumentar la oferta educativa a nivel estatal, particularmente en regiones como la Costa y el Istmo, donde se han estado estableciendo nuevas facultades.
«Queremos que la universidad crezca, pero de manera planificada, asegurando que podamos ofrecer una educación de calidad a más jóvenes», afirmó.
A pesar de que las actuales sedes no han sido construidas por la universidad, Carreño agradeció el apoyo de los gobiernos municipales, que han donado o facilitado los espacios.
En el ámbito financiero, la UABJO ha logrado reducir una deuda de laudos de 90 millones de pesos a 42 millones, lo que representa más del 50% de avance en su resolución.
Sin embargo, la universidad aún enfrenta deudas pendientes que datan de administraciones anteriores, incluyendo una con el gobierno estatal que asciende a varios millones de pesos.
«Estamos trabajando en un convenio para evitar los costos adicionales por intereses y que la deuda principal pueda ser pagada en condiciones justas», explicó el rector.
A pesar de los retos, Carreño se muestra optimista sobre el futuro financiero de la UABJO. Subrayó que los recursos actuales deben utilizarse con responsabilidad, sin desviar fondos destinados a la operación cotidiana de la universidad.
Para ello, la administración ha priorizado la negociación y el pago gradual de las deudas, evitando cualquier riesgo de afectación a la liquidez de la institución.
Cristian Carreño está liderando un proceso de reformas clave para la UABJO, que busca mejorar la gestión interna, fortalecer la vinculación con el gobierno federal y ampliar las oportunidades educativas en el estado de Oaxaca.
A través de estas acciones, Carreño reafirma su compromiso con la transparencia, la eficiencia y el bienestar de la comunidad universitaria.
«No estamos haciendo nada extraordinario, solo cumpliendo con nuestras obligaciones», concluyó, convencido de que estas reformas garantizarán un futuro más sólido para la UABJO y sus estudiantes.
