Misael Sánchez
En un contexto de ajustes salariales y renegociaciones contractuales, el secretario de Finanzas de Oaxaca, Farid Acevedo López, ofreció un panorama sobre los incrementos salariales y prestaciones que afectan a los trabajadores del estado.
En la conferencia matutina del gobernador Salomón Jara, subrayó la importancia de estos ajustes, los cuales responden principalmente al impacto de la inflación, así como a las conquistas laborales alcanzadas mediante negociaciones colectivas.
Cada año, el estado ajusta los salarios de sus trabajadores en función del índice inflacionario, una medida que, según Acevedo, busca mantener el poder adquisitivo de la plantilla laboral.
Para este ciclo, el aumento salarial quedó fijado en un 4.6%, un ligero incremento respecto al 4.5% de años anteriores.
Además de este ajuste salarial, los trabajadores también recibirán un aumento del 3.5% en sus prestaciones sociales, lo que implica un mayor esfuerzo presupuestal por parte del gobierno estatal.
Acevedo detalló que el impacto financiero de estos incrementos, junto con otras prestaciones adicionales, asciende a alrededor de 180 millones de pesos.
Estas erogaciones, explicó, son prácticamente inevitables, ya que están estipuladas en los contratos colectivos de trabajo y responden a conquistas laborales previas que deben ser revalorizadas cada año.
Sin embargo, el secretario también hizo referencia a una serie de prestaciones adicionales que van más allá de las estrictamente estipuladas en los contratos.
Estas conquistas adicionales incluyen reconocimientos por antigüedad y festividades que, si bien son legales y negociadas, representan un costo extra para el gobierno.
El presupuesto destinado a estas prestaciones adicionales detalló Acevedo, es de aproximadamente 42 millones de pesos, aunque advirtió que el monto final podría ser menor debido a ajustes que se realizan tras las licitaciones. «Es posible que, al final del proceso, los costos disminuyan entre cuatro y seis millones de pesos, pero no representará una diferencia significativa», señaló el funcionario.
Acevedo también insistió en que todas las asignaciones y montos están estipulados por ley o contrato colectivo, lo que garantiza la legalidad y transparencia del proceso.
Aunque los montos adicionales, como los 42 millones mencionados, puedan parecer elevados, el secretario aclaró que estos topes están sujetos a posibles ahorros durante las licitaciones.
El impacto global de estas renegociaciones, tanto en el salario como en las prestaciones sociales, resalta el peso financiero que tienen las conquistas laborales sobre el presupuesto estatal. Acevedo reconoció que estas medidas son necesarias para garantizar el bienestar de los trabajadores, pero también representan uno de los desafíos económicos más importantes que enfrenta el gobierno de Oaxaca.
La obligación de cumplir con los compromisos contractuales, junto con el esfuerzo por buscar eficiencias en el proceso, demuestran el delicado equilibrio entre las demandas laborales y las posibilidades presupuestarias del estado.
Las declaraciones de Farid Acevedo López ponen de manifiesto la magnitud de los ajustes salariales y de prestaciones sociales en Oaxaca, subrayando la necesidad de cumplir con los compromisos establecidos y, al mismo tiempo, buscar eficiencias en el gasto público.
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