MISAEL SÁNCHEZ SARMIENTO
El sector inmobiliario en Oaxaca enfrenta una preocupante crisis, especialmente por el encarecimiento de la vivienda.
Según datos de la Sociedad Hipotecaria Federal, al primer trimestre de 2023, el Índice de Precios de la Vivienda revela cifras alarmantes que evidencian la inaccesibilidad de la vivienda para la mayoría de la población.
El precio medio de la vivienda en Oaxaca se sitúa en 1 millón 529,698 pesos, una cifra que supera ampliamente los ingresos mínimos de la mayoría de los habitantes del estado.
Este dato coloca a Oaxaca en el lugar 14 a nivel nacional en cuanto a precios de vivienda.
Para dimensionar la gravedad de la situación, se revela que el 25% de las viviendas se vendió a un precio promedio de 749,090 pesos.
Sin embargo, se trata de viviendas con sólo los espacios indispensables, mínimos, para la supervivencia.
A medida que avanzamos en el espectro, el 50% de las viviendas se comercializó en 1 millón 011,919 pesos, y el 75% alcanzó un valor de 1 millón 515,106 pesos.
Estas cifras demuestran que incluso la vivienda más asequible en el mercado inmobiliario de Oaxaca sigue siendo inalcanzable para una gran parte de la población con ingresos mínimos.
Este panorama, también, refleja una preocupante brecha entre los precios de la vivienda y la capacidad adquisitiva de la población.
El sueño de adquirir una vivienda propia se vuelve cada vez más distante para muchos oaxaqueños, lo que perpetúa la desigualdad y la falta de acceso a un derecho básico.
Es fundamental que las autoridades y los actores involucrados en el sector inmobiliario tomen medidas para abordar esta crisis.
Sobre todo, porque no todos los que necesitan vivienda, cuentan con aportaciones de vivienda a cualquiera de los esquemas de los trabajadores que realizan aportaciones para este fin.
Se requieren políticas públicas que fomenten la construcción de viviendas asequibles, la regulación de precios y el acceso a créditos hipotecarios accesibles.
Asimismo, es necesario impulsar la colaboración entre el sector público y privado para encontrar soluciones que garanticen una oferta de vivienda que se ajuste a las necesidades y capacidades económicas de la población.
En conclusión, el encarecimiento de la vivienda en Oaxaca se ha convertido en un problema acuciante que demanda atención urgente. Es fundamental tomar medidas para revertir esta situación y asegurar que el acceso a una vivienda digna sea una realidad alcanzable para todos los habitantes del estado.